El viernes 28 de mayo, el veredicto encontró culpable al agente de policía bonaerense Luis Chocobar. El Tribunal Oral de Menores (TOM) 2 decidió la calificación legal: “homicidio con exceso en el cumplimiento de un deber” debiendo soportar una pena de dos años de prisión en suspenso (cumplimiento de la pena en libertad) e inhabilitación especial por cinco años para desempeñarse en funciones operativas con la utilización de armas de fuego.
Los hechos. El 8 de diciembre de 2017, el Sr. Frank Wolek viajó desde los Estados Unidos a visitar y recorrer nuestro país. En esa oportunidad conocía el barrio de La Boca, tomaba fotos de los graffitis, cuando vio que una persona menor de edad se le acercaba, fue entonces que decidió cambiar de rumbo, camino unos pasos y se detuvo frente a un mural de tango que le llamó la atención. En ese mismo momento, dos personas, una de ellas menor de edad -que resultó juzgada en el marco del mismo juicio a Chocobar- intentaron robarle su cámara. Uno de ellos lo apuñaló con un cuchillo, y ambos lo golpearon fuertemente.
Frank contó que “entró en pánico cuando vio un cuchillo”. Pablo Kukoc logró arrancarle la cámara tironeando de la correa, y ambos ladrones salieron corriendo. Frank, intentó incorporarse para pedir ayuda, mientras algunas personas que se encontraban en el lugar paseando, los persiguieron para recuperar el objeto robado que terminaron tirando en la vereda de un local.
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El agente de policía, estando de civil y fuera de servicio, luego de identificarse y dar la voz de alto a los delincuentes que pretendían escapar, accionó su arma y efectuó varios disparos, uno de los cuales terminó con la vida de Kukoc (uno de los ladrones).
El fallo. En el momento del hecho, el agente de la bonaerense, Luis Chocobar, tenía 30 años de edad. Tuvo que esperar cuatro años para ser juzgado. Cuatro años que parecen veinte. Quienes se han sometido a un proceso penal lo saben, conocen muy bien las marcas que sobre el cuerpo y la mente deja un sistema que pretende justicia pero que, muchas veces desde lejos, se nota que la balanza se inclina, para un lado o para el otro.
“Choco”, como le gritan en la calle, continuó desempeñando funciones en la bonaerense, tuvo la “suerte” de transitar el juzgamiento en libertad. Hoy con 34 años, y un veredicto que lo encuentra culpable, regulado en una escala penal de dos de prisión años en suspenso, continuará en libertad, pero el proceso no termina, aguardará los fundamentos de la sentencia, y según expresó su abogado defensor, apelarán esta decisión.
La historia de Chocobar. Criado por sus abuelos, que lo rescataron de un reformatorio donde lo depositaron sus progenitores. Nacido en Salta, trabajó desde los 11 años en el campo encañando tabaco, a los 18 años se fue para Buenos Aires porque le quitaron una beca por desaprobar un examen de contaduría. Trabajó en un “súper chino” y limpió baños públicos en Puerto Madero. Ingresó en la policía a los 27 años, vocación que se le despertó de niño.
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Hizo lo que tenía que hacer, dice no ser un asesino, ni tampoco un héroe, y si ve que una vida corre riesgo, tiene que actuar, que por el hecho del que hoy resulta culpable, su destino podría haber sido otro si se hubiese dado vuelta, “podría haberme puesto los auriculares y chau, pero no está en mi eso” contó en su momento Luis Chocobar.
Del “Gatillo Fácil” a la “Doctrina Chocobar”: tirar a matar y que caiga quien caiga, o actuar en el momento preciso, en el lugar indicado, cumpliendo funciones y honrando su cargo, como lo indica la ley.
¿Los fundamentos? El 10 de agosto. Conociendo los argumentos de la sentencia, la defensa del agente de policía, como la fiscalía y la querella, representada por la madre del delincuente que resultó fallecido, con la asistencia letrada del Programa de Asistencia y Patrocinio Jurídico de Víctimas de Delitos de la Defensoría General de la Nación, podrán apelar esta decisión de dos años de prisión en suspenso e inhabilitación ante la Cámara Federal de Casación Penal.
El jurado encontró culpable a Luis Chocobar, la sentencia hasta no quedar firme podrá ser discutida, ¿absolverán en otra instancia a Luis Chocobar como su defensa técnica solicitó?
Juicio por jurados, desde 1853, contenido en nuestra Constitución Nacional, es una forma de juzgar causas penales en donde un grupo de ciudadanos del lugar donde se cometió el hecho, decide si la persona a la que se le atribuye la responsabilidad penal es culpable o inocente. La defensa de Chocobar solicitó sea juzgado por ciudadanos, la Justicia se lo denegó.
Vos, ciudadano, después de leer esta nota ¿lo encontrás culpable o inocente?
María Eugenia Pagés. Abogada. MSL Estudio Jurídico. eugepages@gmail.com
