Luego del primer discurso de Javier Milei como presidente de la Argentina, se ha viralizado su frase: “No hay plata”. Pero los emprendedores nos caracterizamos por encontrar oportunidades en los tiempos difíciles. En este artículo, exploraremos las herramientas y las mejores prácticas que podemos implementar en un contexto de estanflación.
La estanflación es como tener dos problemas al mismo tiempo: estancamiento e inflación. El estancamiento se produce cuando la economía se detiene o no crece. La inflación, mucho más conocida por los argentinos, es la suba generalizada de precios, muchos de ellos están subiendo fuertemente porque estaban artificialmente bajos.
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A nivel macroeconómico, es un desafío importante porque las soluciones para uno de estos problemas pueden empeorar el otro. Pero dejamos este dilema en manos de quienes han sido elegidos para solucionarlos.
En lo que respecta a nuestra provincia, la tradicional presencia del estado como agente impulsor de la economía, se verá indefectiblemente afectada y así lo anunció el gobernador Sergio Ziliotto ante el consejo asesor de I-COMEX: “Vamos a seguir interviniendo en la economía pero cambiaron las prioridades”.
Todo esto muestra un panorama desalentador para los emprendedores, pero veamos qué podemos hacer nosotros en nuestros negocios para mejorar sus números vitales:
Ventas: Vender, vender y vender. En estos tiempos de crisis, debemos enfocar nuestros esfuerzos en no perder ninguna venta. Las ventas son el oxígeno de los negocios y hoy lo necesitamos más que nunca.
Trabajar en la experiencia del cliente, ofrecer más valor agregado, mantener o incluso aumentar la calidad de los productos y servicios, implementar un plan de fidelización de clientes, realizar alianzas y colaboraciones con otros emprendedores, mejorar la estrategia de Marketing, optimizar las redes sociales, incorporar otras líneas de negocio, etc.; son todas buenas ideas para no dejar escapar ninguna venta.
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Si no venís anotando las ventas, este es un buen momento para comenzar. Tomá una hoja de calendario de este mes y día por día anotá el total que vendiste. Al final de la semana lo sumás, lo comparás con la semana anterior y te fijás un objetivo para la semana siguiente.
Margen Bruto: De las acciones recomendadas en el punto anterior, ninguna recomienda hacer promociones ni bajar los precios. Todo lo contrario. Deberías defender tu precio o incluso subirlos si suben tus insumos.
En este tipo de escenarios, es muy común que los negocios cierren porque después de un tiempo se den cuenta que estaban vendiendo, pero que no les quedaba nada.
Hay que tener los precios actualizados, cuando tu proveedor te indica que hay un cambio de precios, en ese mismo momento, vos deberías actualizar los tuyos.
Compromisos Fijos: Respecto a los compromisos fijos, te conviene sentarte a hacer un listado de todos los pagos que se realizan mensualmente y luego de ello analizar cada uno, viendo si se puede reducir o incluso eliminar.
Tener los costos fijos contenidos, te dará una mayor flexibilidad para adaptarte a las nuevas condiciones de mercado o para aprovechar las oportunidades que pudieran surgir. ¿No sabés por dónde empezar? Escribinos a info@estudiolorda.com.ar y te mando una planilla que te ayudará con esta tarea.
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Mantener un negocio en este escenario es un desafío enorme, pero seguramente también habrá nuevas oportunidades. La combinación de eficiencia operativa minimizando los costos fijos, mantener el margen bruto, una gestión financiera prudente y un enfoque centrado en el cliente para no perder ninguna venta, serán la clave del éxito.
Nicolás Lorda contador, emprendedor y docente universitario. Más de 25 años de experiencia asesorando a pymes. nlorda@estudiolorda.com.ar
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