Ctrl Z: una historia de superación personal

Any Carballo (36) es diseñadora gráfica y estudia Comunicación Social. Se recibió de su primera carrera en 2011 en el terciario del IVT (Instituto Visión Tecnológica) y actualmente trabaja en su emprendimiento Ctrl Z.

Empezó en 2014, primero con familiares y conocidos que la iban recomendando boca a boca y con el tiempo “rompió el cascarón” y se animó a publicitarse y hacerse conocer. En ese momento creó el nombre “Ctrl Z, una solución gráfica a tus problemas”. También hizo una página de Facebook, una de Instagram y comenzó a buscar nuevos clientes.

“El nombre Crtl Z es por el comando “deshacer” en la computadora, el paso atrás. Y el slogan es porque la persona piensa la idea, y si le resulta un problema yo me encargo de buscarle la solución”

Any Carballo

El nombre nació pensando con amigos como sería poder hacer Crtl Z en la vida real, equivocarse y poder volver atrás la acción inmediatamente. Entre chistes y charlas salió como nombre del emprendimiento con el que empezó a ponerle más el cuerpo y una cara visible al negocio para que salga adelante.

Siempre tuvo el apoyo de familia y amigos por lo que habla del emprendimiento plural. “Hacemos entre todos, el detrás de escena es con mucha gente que me acompaña. Sin ellos creo que nunca podría haber avanzado así, agradezco mucho tener esta red de contención y empuje” explica.

“Hubo momentos de mucho miedos y gastos hace un año. El 15 marzo 2023 inauguré el espacio en el que estoy ahora, Roque Saenz Peña 1382 y fue un desafío. Con la situación económica argentina que siempre parece complicada, pensar y no saber si va a funcionar un local o si iba a poder costear los gastos. Son muchas cosas a la hora de emprender y animarse a dar un paso adelante”

Any Carballo

Pero Crtl Z se disparó en 2020 cuando a pesar de mantenerse en su casa empezó a comprar máquinas propias. Recuerda que le pedían productos en los cuales tenía que terciarizar parte del proceso, por lo que no le quedaba mucho margen y se le iban los costos. Empezó por la máquina de sublimar con un crédito municipal. Desde ese momento pudo imprimir sobre gorras, tazas, platos, chops, mates y con otra plancha también remeras, bolsas, llaveros. Se abrió una gran variedad de superficies posibles.

El problema fue que en enero llegó la máquina y mercadería y en marzo se decretó la pandemia. Fue un shock porque tenía seis meses antes de tener que empezar a devolver el préstamo.

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“Empecé a mostrar el emprendimiento por las redes sociales y a hacer publicidad. Se empezó a hacer un boca en boca muy lindo. En ese momento me contacté con chicas que hacían desayunos, yo diseñaba las tazas, los chops o mates y ellas lo hacían pasar a buscar con cadetería para llevárselo al cliente, todo lo que se podía hacer a pesar de las restricciones del aislamiento. Para el Día del Padre hice lo mismo con sets de asados y delantales de cocineros. A pesar de la pandemia pude trabajar, aunque de otra manera”

Any Carballo

Pasado el aislamiento estricto, en 2021 se mudo al living de sus papas que le ofrecieron el espacio. Ahí los clientes podían retirar por el domicilio o pedir presupuestos. Eso duró dos años. Pero todo cumple un ciclo y sentía que quería ampliar la maquinaria por lo que pidió otro crédito en 2022 con el que compró la máquina para hacer pines y la máquina para cortar polifan, con lo que se hacen las letras corpóreas para cartelería. El lugar le quedaba chico y quería probar con un espacio con más visibilidad. Ahí surgió el espacio actual ubicado en Roque Sáenz Peña 1382, donde alquila.

“Me queda muy bien este lugar porque mi hija va a la escuela a dos cuadras. Tengo dos, tengo a Ema de ocho años y Amparo de dos y medio. Finjo demencia para hacer todo. Es difícil pero no imposible, trato de esforzarme y que salga lo mejor posible. Además, estoy a un final y la tesis de recibirme de comunicadora social. El final que me espera es de los más largos, y lleva muchas horas las cuales no estoy teniendo. Igual me encanta la carrera, no la padecí nunca”

Any Carballo

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Cuando habla del futuro mantiene que le gustaría poder seguir creciendo desde lo gráfico, agregar más máquinas y tener la posibilidad de emplear a amigos y familiares. Y también por supuesto, recibirse.

“Es mi espacio y yo le fui dando la impronta y me lo apropié. Miro para atrás y me siento orgullosa de todo lo que hice y quiero seguir creciendo. Lo siento como una historia de superación personal, más que me voy a recibir de comunicadora social y quiero ejercer la carrera. Haciendo exactamente qué, lo veré en un futuro”

Any Carballo

Ctrl Z. Roque Sáenz Peña 1382, Santa Rosa. Teléfono al + 54 2954 573441 o en su Instagram @ctrlzdiseño

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