Nicolás Balsa (28) es un fonoaudiólogo pampeano que luego de graduarse en 2021 en la Universidad Nacional de Córdoba regresó a su ciudad natal, Santa Rosa, para ejercer su profesión. Desde #LPN tuvimos la oportunidad de dialogar con él sobre su historia de superación frente a la tartamudez y cómo su propia experiencia impactó en su elección profesional y se convirtió en fuente de motivación para otras personas.
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“Espero que no me ganen los nervios”, dice Nicolás antes de la entrevista. Lo hace de corrido y si hay trabas, su tartamudez es imperceptible. Esto es así porque lleva toda una vida trabajando en la fluidez del habla. Precisamente, su interés por la fonoaudiología se gestó desde temprana edad, influido por su propia experiencia como paciente de este campo.
“Creo que con 8 años ya tenía previsto estudiar fonoaudiología, porque como la mayoría, fui paciente de fonoaudiología por mucho tiempo, por una condición en la cual hoy sigo trabajando mucho, que es la tartamudez”.
Nicolás
Según la Asociación Argentina de Tartamudez (AAT), la disfluencia o tartamudez es una alteración en la fluidez del habla, caracterizada por repeticiones de silabas, sonidos o bloqueos. Lo más común es que se presente cuando los niños empiezan a desarrollar su lenguaje, entre los 2 y 5 años, aunque puede aparecer en una edad más avanzada. Se presenta mayormente en varones que en mujeres (de 5 personas 4 son varones).
«Generalmente mi dificultad recaía en los comienzos de las frases. Me bloqueaba en los artículos primero y después repetía dos veces una sílaba en cada palabra, generalmente las que son compuestas: «Trabajo. TRA TRA bajo. Grabar .. gra gra grabar». También palabras de comienzo explosivo con P, T, B,C,K«.
Nicolás
Ya como estudiante en Córdoba, se enfocó en trastornos vocales y pacientes adultos, pero la pandemia marcó un cambio radical en su vida. “Mi sueño era enseñarle a cantar a los cantantes de cuarteto, imagínate”, dice. A pesar de que al principio soñaba con un camino diferente, hoy se dedica de lleno al lenguaje de las infancias.
Su experiencia personal brinda aliento a los padres que llegan a su consultorio con niños y niñas que también enfrentan la tartamudez, demostrando que es posible superarla y encontrar herramientas para mejorar la comunicación.
“Me preocupaba si iba a ser capaz de estar frente a alguien que lo tenga, pero con el tiempo la verdad que lo fui asimilando bien, no me largué de una con esto. La tartamudez siempre fue como un motor, me ayudó muchísimo. Hoy es lo que me permite dar como una especie de tranquilidad, llegan muchos padres con niños con esta condición y se les van muchos miedos al ver a alguien que pudo estudiar, que pudo ser fonoaudiólogo, que se puede tratar”.
Nicolás
Nicolás enfatiza cómo el ritmo de vida moderno afecta a todas las personas, incluso a aquellas sin trastornos del habla. Para quienes enfrentan estos desafíos, la ansiedad es aún más abrumadora.
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“Sinceramente, hay veces que si me trabo, ahora no se cómo lo estoy controlando. Yo estoy hablándote y ya estoy pensando en qué te puedo llegar a decir después. O sea, el nivel de ansiedad es un campo de batalla diario, tanto para mí como para los peques cuando vienen al consultorio, como para los padres. Entonces se trata de controlarlo. Pero sí, muchas veces me jugó malas rachas”.
Nicolás
El trabajo con infancias
Cuando las personas acuden a la consulta con el fonoaudiólogo/a, la primera pregunta que hacen es: «¿Por qué? ¿Por qué lo tengo?«. A pesar de las diversas hipótesis y teorías que existen sobre el origen de esta condición, la realidad es que su causa es multifactorial. Esto abarca desde la influencia genética, que desempeña un papel crucial, hasta la dinámica familiar en términos de demandas y nivel de exigencia, entre otros factores.
El enfoque de Nicolás con los infancias es a través del juego, ayudándoles a comprender conceptos como hablar rápido o bloquearse. Fomenta la respiración consciente y el control del cuerpo como técnicas fundamentales. También destaca la importancia del apoyo psicológico en este proceso.
«Uso mucho, por ejemplo, la imagen de la tortuga y el conejo para diferenciar lo que es ir rápido, lo que es ir lento. Los estimulo también, son niños que muchas veces vienen con un nivel de lenguaje un poco bajo, entonces primero vamos por ese lado, después afianzamos lo que es los bloqueos, las latencias. Les indico que debemos respirar, tener control un poco de lo que es su cuerpo. Muchos nenes emanan los bloqueos cuando hablan con el cuerpo, cierran sus ojos, mueven los brazos, se ponen duros, no solamente es que estoy hablando y ¡pum! me bloqueé”.
Nicolás
Aunque su trabajo principal es con infancias, anhela la oportunidad de trabajar con personas adultas, reconociendo que muchas de ellas ya han avanzado en su proceso de comunicación y enfrentan desafíos distintos.
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“Lo que pasa es que el adulto está como más curado de espanto, te dice ¿a esta altura qué me lo voy a arreglar? Con el adulto se trabajan técnicas en los inicios vocales, cómo elimino tensiones al hablar, cómo lo mantengo durante las frases… los bloqueos arrancan en cualquier parte de la palabra. Y los adultos tienen un mayor conocimiento de su desarrollo del habla”.
Nicolás
Desmontando mitos
Es común escuchar que la tartamudez se atribuye a nervios o factores emocionales, pero estos son efectos de convivir con la condición, no su causa. Otro mito es que afecta el intelecto, una teoría sin respaldo evidente. Hay numerosas personalidades destacadas en el deporte y el arte que han enfrentado la tartamudez como Marilyn Monroe, Bruce Willis, Borges, y más contemporáneos como el futbolista James Rodríguez o el cantante Ed Sheeran.
Es notable la presencia de personas famosas, incluyendo cantantes, que han vivido con esta condición. Un ejemplo reciente es el joven de La Voz Argentina, oriundo de Córdoba, con una marcada disfluencia pero una hermosa voz. Al cantar, nunca experimentó bloqueos, lo que plantea la pregunta: ¿Por qué al realizar actividades artísticas, no se experimentan bloqueos, incluso sin poseer una técnica específica?
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Según Nicolás, esto puede explicarse porque el hemisferio del cerebro responsable de las habilidades artísticas supera al otro hemisferio encargado de las funciones lingüísticas, el pensamiento y otras tareas, actuando como una especie de escudo que facilita el proceso. Esta dinámica explica por qué muchos cantantes y actores no experimentan bloqueos al expresarse. Otro mito o creencia muy extendida tiene que ver con el trabajo de los fonoaudiólogos/as.
“Está la creencia del que el fono arregla la R, nada más. Yo creo que siempre es necesario todo lo que implica aquello que es lo más importante para el ser humano, que es hablar, comunicarse”.
Estos mitos demuestran que a la sociedad aún le falta mucho conocimiento sobre estos temas. Durante la pandemia, Nicolás investigó en su trabajo de su tesis el conocimiento sobre disfluencia/tartamudez en integrantes de la Asociación de Tartamudez Argentina. Allí reveló la falta de conciencia no solo en la sociedad, sino en las personas que padecen estas condiciones. Por eso insiste en la necesidad de informar y educar.
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El bulliying es otro tema complejo que surge con frecuencia, generando preocupación en los padres. Nicolás no fue ajeno a esta experiencia, incluso dentro de su propia familia. Por eso, destaca la importancia de buscar información, diagnósticos y evaluaciones, tanto para niños y niñas en pleno desarrollo como para personas adultas. Nunca es demasiado tarde para buscar ayuda y mejorar, ya que no se trata de una solución rápida. La tartamudez no tiene cura y su tratamiento es un proceso que requiere tiempo y paciencia.
«De niño, mi familia padeció mucho con esto que me pasaba y hoy la verdad lo disfruto. Disfruto poder hablar, ayudar, informar. Creo que el mensaje es ese, que la gente se siga informando sin miedo».
Nicolás
Actualmente, forma parte de los CAE (Centros de Apoyo Escolar), equipos interdisciplinarios presentes en las escuelas primarias que incluyen psicopedagogos, psicólogos y trabajadores sociales.
«Lo lindo es que docentes y directivos que están día a día con los niños se están interesando en el tema, entonces se está armando algo muy lindo. Cualquier tipo de temas, sea una tartamueéz, sea una R, sea otro tipo de condición, yo creo que al menos La Pampa está re encaminada en ese sentido«.
Nicolás
Nicolás atiende en su consultorio de Oires, Centro Categorizado de Estimulación Temprana y Apoyo a la Inclusión Escolar.
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