«¡Parecen caniches! El que iba a ir a esquilar estaba saturado de turnos. El que se comprometió, salió diciendo que no tenían filo las máquinas. Y el que apareció, es nuevo y sin experiencia. ¡Esperemos que se emprolijen un poco!»
Por Milagros Agostina Andrada, Estancia La Edelmira. Toay , La Pampa.