La Porfiada, un refugio de la cultura pampeana, creado por una médica
Vení, charlemos, sentate un poco, dice la mujer, con la sonrisa en la voz. Es un milagro su ternura. Sirve el té como un abrazo fraternal. Estamos ella y yo en su jardín, entre pinos, flores y eucaliptos. El sol se cuela entre las ramas con ese calorcito que encandila. Vení, charlemos, dice la mujer... Continuar leyendo