Guadalupe Belén Lucero de 5 años, desapareció el día lunes 14 de junio en San Luis. Controles en todos los accesos a la provincia, más de 130 allanamientos, 500 efectivos buscándola en todo la provincia, la activación del sistema Alerta Sofía y la difusión de su imagen por Missing Children, no lograron hasta el momento dar con el paradero.
Tres Bomberos Voluntarios de La Pampa, junto a sus perros adiestrados, fueron convocados para colaborar en la búsqueda de Guadalupe Lucero. Martín Juanes y el perro Akira, del cuartel de Miguel Riglos; Pablo Raúl Engraff y la perra Nina, de Colonia Barón, y Jorge Montangie y el perro Jack, de Jacinto Arauz.
La niña desapareció el lunes, entre las 19 y las 20, de la casa de su tía, situada en el barrio 544 viviendas, en la ciudad de San Luis. Lucas Chacón, jefe de Relaciones Policiales de la provincia, detalló en declaraciones a TN que son más de 400 los efectivos que la están buscando en toda la provincia, quienes corresponden a seis unidades regionales.
El Gobierno nacional ofreció una recompensa de $2 millones para obtener datos que ayuden a encontrar a Guadalupe. Quien quiera dar detalles sobre su posible ubicación puede comunicarse telefónicamente con el Programa Nacional de Coordinación para la Búsqueda de Personas Ordenada por la Justicia, al número telefónico de acceso rápido 134.
El día miércoles se realizaron rastrillajes en once sectores en simultáneo para intentar dar con el paradero de la niña. El martes, la policía encontró restos de ropa cerca de un río pero la familia negó que pertenecieran a Guadalupe.

Por su parte Yamila Cialone, madre de Guadalupe, aseguró a la prensa: «La persona que la tenga, porque sé que está con alguien, que se ponga en mi lugar y me la devuelva». «Tengo un presentimiento de lo que pasó, pero no lo puedo decir hasta que Guada esté conmigo y entonces voy a aclarar las cosas», añadió y enfatizó que «la policía está al tanto» de todo.
El miércoles, Eric Lucero, su papá, pidió que el Gobierno de San Luis disponga una recompensa para quien aporte información sobre la niña, mientras que Silvia, la abuela de la nena, pidió que los atienda el ministro de Seguridad provincial, Luciano Anastasia.
La niña vive en el barrio 208 viviendas de la ciudad capital, es de tez trigueña, tiene cabello lacio, por debajo de los hombros, un lunar en la mejilla izquierda, y al momento de su desaparición vestía una campera parca negra con capucha, buzo rosa y llevaba botas negras.
Con información de Agencia Télam.